Desde CAMYP seguimos reclamando ante las autoridades del Ministerio de Educación que se reconozcan los derechos y necesidades de las personas trasplantadas, en lista de espera del Incucai, por estudios, rehabilitaciones y tratamientos bajo el amparo de la ley 26.928.
A fin de que la licencia solicitada no impacte en la licencia común o de largo tratamiento y pérdida del presentismo como se aplica en la actualidad.
Impulsamos el pedido y seguimos reclamando en vías de garantizar que los derechos de los docentes queden resguardados por nuestro Estatuto.