Las/os maestras/os de la Ciudad, no dejamos nunca de dar clases, y tras esfuerzos meramente personales aprendimos a adaptarnos en función al contexto epidemiológico y a las necesidades de cada grupo.
Existe evidencia en nuestro accionar que cada día cuenta, pero nos sobran motivos para argumentar que en CABA esa bandera es sólo con intenciones ajenas a priorizar la educación.
Exigimos al GCBA que cumpla las medidas nacionales en pos de defender la vida de las/os docentes, alumnas/os y comunidades educativas y expresamos que la única real y verdadera militancia que realizamos es la de Educar, siendo la presencialidad nuestro hábitat ideal, pero sabiendo que la virtualidad es el escenario propicio en un contexto que pone en juego la vida de nuestras comunidades.
Seguimos con #paroalapresencialidad