El GCBA presentó un proyecto en la legislatura porteña para modificar el importe de las asignaciones familiares según el sueldo de las/os trabajadoras/es.
La propuesta establece que quienes perciban un salario bruto menor a $ 60000 recibirán una asignación por hijo/a de $ 3500, quienes perciban un salario bruto mayor a $ 60000 y hasta $114500 será de $900 y para quienes perciban un salario bruto mayor a $114500 no cobrarán ninguna asignación.
Un salario bruto de $114.500 es un salario neto de bolsillo de aproximadamente $92.700. Dicho monto está muy por debajo de lo que necesita una familia para vivir.
En respuesta al histórico pedido de las organizaciones sindicales de aumentar el monto de las asignaciones familiares congeladas desde el año 2011, el GCBA elige eximir trabajadoras/es del cobro del mismo utilizando variables que no tienen en cuenta los índices inflacionarios de los últimos años.
¿Cuáles son las evidencias que fundamentan este proyecto?
La actualización de los montos de las asignaciones familiares es una lucha histórica. Diez años de congelamiento demandan la necesidad de su aumento y bajo ningún punto de vista esto debe implicar la desaparición de derechos conquistados.
Es deber de las/os legisladoras/es ponerse del lado de las/os trabajadoras/es y no apoyar un proyecto que atenta contra las necesidades básicas. Es fundamental el apoyo del Estado para atravesar las crisis económicas. El actual contexto no puede dirimirse en decisiones arbitrarias donde una vez más se ven avasalladas/os aquellas/os que día a día luchan con compromiso por una sociedad más justa y por vivir en ella dignamente.
ProyectodeNorma__Expediente_2196_2021.-1
