
Si #cadadíacuenta como manifiesta el Ministerio de Educación fuera una convicción, se respetarían los espacios de encuentro y de planificación institucional fundamentales para elaborar acuerdos pedagógicos dentro de las instituciones. Acuerdos que asumen un espacio de diálogo y escucha que el Ministerio de Educación decide cercenar eliminando la intención plural, colectiva y democrática de la EMI.
Sería interesante discutir el fundamento pedagógico de cumplimentar un calendario educativo o mejor dicho la intención política detrás de embanderarse en que las/os chicas/os estén en la escuela sin invertir desde su rol de gestión en condiciones de infraestructura y mobiliario para que eso suceda y por supuesto, ocupándose sobre las condiciones laborales de las/os docentes, condiciones sobre las cuales el Ministerio se rehusa a trabajar. Porque la decisión de bajar año a año el presupuesto educativo si es una convicción del Ministerio de Educación, quizás sea la más genuina que posee teniendo en cuenta su concepción sobre Educación.