Una vez más, el GCBA se basa en evidencias que no atienden las realidades escolares. En vísperas de la llegada del invierno y las bajas temperaturas es insostenible poder mantener la presencialidad sin que ello afecte la salud de las comunidades. Las campañas políticas en una puja por triunfar se desentienden de las realidades escolares para pelear por titulares que lejos están de reflejar una propuesta pedagógica con sentido y sostenible.
Los contagios se evidencian en el aumento de los casos de las/os niñas/os, en los actos públicos virtuales que expresan la gran demanda de pedido de suplentes para cubrir casos de COVID y en las lamentables e irrecuperables pérdidas que viene sufriendo las comunidades a partir de la circulación del virus.
Mientras los titulares refieren a un gobierno que prioriza la educación, con las luces apagadas y en silencio se modificaron artículos del estatuto, se aplicaron descuentos castigo a las/os docentes que respetaron el DNU, se desligaron de abastecer a las escuelas de elementos de seguridad e higiene.
Insistimos que cada caso cuenta, nos negamos a pensarlos como cifras, nos negamos a desestimar el dolor y el miedo de quienes sostienen la presencialidad en las escuelas, nos negamos a creer que estás políticas evidencian compromiso real y pedagógico.
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